Todos los productos, tienen un ciclo de vida, el cual comienza con las estrategias que usamos para introducirlo al mercado.
Este es el primero de una serie de cuatro artículos, que estudian el ciclo de vida de un producto, los cuales han sido redactados para ayudarte a entender la fase en la que te encuentras.
Cada una de estas fases, debe ser distinguida de la otra, a fin de poder aplicar las estrategias correctas que garanticen pasar a la fase siguiente, mantengan el uso y rotación o bien le den salida al producto como tal.
Así que manos a la obra:
Fase 1; Introducción de un producto al mercado:
Una vez terminado nuestro estudio de mercado y lanzado nuestro producto, toca "presentarlo al público". Para esto podemos valernos de estrategias promocionales que se centren en rebatir las siguientes objeciones:
"No conozco ese producto, servicio o marca."
"No me acostumbro a ese cambio en su contenido."
La primera objeción, hace referencia a un producto nuevo en el mercado, el cual se está introduciendo al mismo.
La segunda, se centra en un producto que claramente viene de una fase de declive, al cual se le han realizado cambios y se percibe por el público de forma distinta.
En este punto, hay dos estrategias principales que se pueden utilizar:
1.- Influenciar en los consumidores recuperando a los perdidos y asegurando a los indecisos:
Podemos emplear para ellos distintas estrategias promocionales como lo son mostrar el nuevo uso que hemos descubierto, incluirlo en una promoción que nos permita reinsertarlo al mercado o bien, generar expectativa por medio del desarrollo de un buen plan de comunicación.
Hay que tener en cuenta que, para un producto que viene desde una fase de declive, generar una percepción de "novedad" en el consumidor, es la mejor estrategia a usar.
En el caso de un producto, marca o servicio nuevo, podemos influenciar a los consumidores mediante líderes de opinión, que puedan llegar a grandes audiencias y gozan de alta credibilidad.
Debemos, en este caso, seleccionar los líderes más aptos para la promoción de nuestro producto, lo cual garantizará llegara las personas correctas. No debemos cegarnos con números de alcance.
Luego de llegar a las personas correctas, se garantiza un verdadero crecimiento sostenible de la marca, producto o servicio.
La fase de introducción de un producto al mercado es una de las que puede tardar más tiempo de acuerdo con las estrategias que se apliquen.
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2.- Mejorar y/o reforzar la estructura e imagen del contenido del producto:
Esta segunda estrategia, consiste en probar las reacciones del mercado mediante el uso de un producto mínimo viable o MVP que permita realizar pequeños cambios e ir mejorando sobre la marcha, adaptando el producto a las necesidades del mercado.
Cuando hablamos de mejorar o reforzar la estructura, no solo hablamos del producto y lo que corresponde a sus componentes: Ingredientes, fragancia o usos generales, sino de toda la estrategia que lo acompaña incluído el plan de comunicación, el cual debe estar centrado en resolver la necesidad del público objetivo.
Si se trata de un servicio, debemos modificar la oferta promocional adaptándola a la que ofrecen los líderes del mercado. De esta forma podremos crear una imagen de nuestro servicio en la mente del consumidor.
Con imagen física, nos referimos concretamente al aspecto visual del mismo: Empaque, colores, forma y presentación que lo hagan más agradable y atractivo al público, de forma que se fomente el uso y consumo del mismo.
En el caso de los servicios, modificar la presentación gráfica utilizando los colores correctos de acuerdo con el rubro y fomentar el uso de los mismos mediante el muestreo es una de las estrategias más eficaces.
Otra de las tácticas que son de mucha ayuda, es establecer un bajo costo del producto, conocido como "precio de introducción", el cual tiene como objetivo acelerar la rotación del producto en el mercado para llevarlo a la fase de crecimiento o consideración.
Conocer antes que nada los insights del mercado es básico y esencial para que los fallos sean minimizados.
¿Y si falla?
Todos los productos en su fase inicial fallan y requieren modificaciones muchas veces sustanciales. Sin embargo esto puede resolverse mediante la creación de un Producto Mínimo Viable, que asegure conocer las preferencias básicas del mercado y establezca un punto de partida. Dicho punto estará cada vez más adelantado si iteramos (repetimos el proceso) lo suficiente.
Creer que un producto funcionará a la primera es el más grande error del comerciante, y el primer causal de abandono de ideas. El mercado está saturado de productos y cada día se buscan soluciones más personales, puesto que cada cliente es diferente.
Algunos consejos finales:
- ✔️Puedes usar influencers, como ya dijimos para motivar a las personas a que consuman tu producto.
- ✔️Puedes apoyar tus esfuerzos con publicidad de pago como Facebook ADS, pero ten en cuenta que deberás establecer una campaña centrada principalmente en el reconocimiento de tu marca o producto. No pretendas vender a la primera.
- ✔️ Resalta siempre los beneficios y usos del producto, en su fase inicial es necesario que el consumidor conozca bien su uso, para que pueda dar paso a la fase de consideración.
Paa que tomes nota de las estrategias que vas a aplicar, y dar seguimiento a las mismas, hemos elaborado una plantilla que te facilitará el proceso.
Finalmente, si necesitas que te ayudemos en la planificación de las estrategias de introducción de tu producto al mercado, envíanos un mensaje a través del chat o agenda una consulta con nosotros, con gusto le daremos respuesta a tu solicitud.
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